La contaminación y la implementación de nuevos sistemas que permitan cuidar el medio ambiente se han convertido en una de las preocupaciones más importantes de la sociedad en general en los últimos años. Lo cierto es que la conciencia ambiental está creciendo y esto se debe a que los datos sobre el nivel de contaminación de nuestro planeta han logrado por fin alarmar no solo al público en general sino también a aquellos que tienen el poder de cambiar un poco las cosas. En el artículo de hoy hablaremos de qué influencia ha tenido esto en los sistemas de transportes logísticos.
La logística y los vehículos ecológicos
La conciencia ambiental es algo que viene en aumento hace algunos años y que definitivamente encuentra su origen en una preocupación legítima con respecto a los grados de contaminación que posee nuestro planeta y las consecuencias que esto podría traernos a todos en un futuro no muy lejano. Los cambios a gran escala suelen radicar en tratar de emitir la menor cantidad de gases perjudiciales posibles y la mayoría de los países han hecho compromisos internacionales para bajar la cantidad de dióxido de carbono que emiten a la atmosfera año a año.
A raíz de la preocupación generalizada por emitir menos gases tóxicos comienzan a surgir diferentes alternativas a los carburantes regulares: además de los coches eléctricos aparecen otros como el gas natural comprimido o el gas licuado del petróleo. Modificar cómo impacta el uso de vehículos en el ambiente es una preocupación para la gente en general pero se vuelve aun más fundamental en el sector logístico si consideramos que estas empresas de transporte manejan flotas de cientos de camionetas, motos y camiones que se mueven durante horas todo el día.
Una de las alternativas que España ha comenzado a implementar y a fomentar en el sector logístico es la de transportes nocturnos para reducir emisiones de dióxido de carbono. ¿En qué se sustenta esta posibilidad de traslados nocturnos? En la enorme cantidad de vehículos que se mueven a diario que muchas veces hace que los camiones se encuentren parados durante varios minutos e incluso horas contaminando el aire innecesariamente.
Por otro lado también se han comenzado a proponer otras soluciones en relación a los transportes urbanos de mercancías y paqueterías que incluyen el uso de drones no tripulados, la electrificación de las flotas de transporte y el uso de otro tipo de vehículos no contaminantes como es el caso de las bicicletas para llevar paquetes de poco tamaño.
Países como Suecia proponen cambios aún más radicales, siendo este el primer país en instalar una autopista totalmente eléctrica y volviendo a utilizar el sistema de troles para el transporte de mercancías reduciendo así los gases que se emiten desde los camiones o furgonetas.